El Ministerio francés de Ecología, Desarrollo Sostenible y Energía ha anunciado que pretende incluir la noción de «delito ecológico» en la legislación nacional, en línea con la decisión de la justicia gala, que confirmó este martes la condena a la petrolera Total por las repercusiones del hundimiento del petrolero Erika en 1999. En la foto de archivo, una importante mancha del fuel vertido en el naufragio del petrolero maltés «Erika» en el estuario del río Loira (Francia).
«Ayer fue un gran día para el derecho medioambiental, no sólo en Francia, sino en el mundo entero» afirmaron en un comunicado la ministra de Ecología, Delphine Batho, y el secretario de Estado de Transporte, Mar y Pesca, Frédéric Cuvillier, quienes indicaron que en los próximos días un comité de juristas medioambientales comenzará a estudiar cómo introducir esta noción en la ley francesa.
Ambos responsables consideraron que la sentencia, que ratificó el fallo de hace dos años a la petrolera Total y a otras sociedades por las consecuencias del hundimiento del barco Erika en 1999, supone «un antes y un después» para otros casos de este tipo.
«Quien contamina, paga»
El reconocimiento del principio según el cual «quien contamina, paga» en el derecho marítimo internacional, la confirmación de la responsabilidad penal de todos los actores de la cadena de transporte marítimo y el logro de una reparación para la parte civil son «avances mayores», según el Ministerio.
Batho y Cuvillier señalaron que les gustaría que Francia «tomara la iniciativa» en la Asamblea General de las Naciones Unidas para introducir un protocolo adicional a la convención de Montego Bay sobre Derecho marítimo, a fin de crear una protección jurídica internacional para alta mar. EFEverde
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