Colombia: Un sector con madera para rato

Concluyó Mundo Madera 2011, una feria donde se evidenciaron problemas y potencialidades que enfrenta esta cadena productiva

El futuro de reforestadores, fabricantes de muebles, papeles y otras empresas conexas de la cadena productiva forestal-madera del país, está en un punto de quiebre.

Y todo porque urge aumentar desde ya las cerca de 300.000 hectáreas del país sembradas en bosques maderables para uso industrial y poder suplir una demanda interna creciente de materias primas y productos provenientes de la madera.

En ese sentido, la meta del Gobierno actual es incrementar en este cuatrienio los cultivos forestales hasta un millón de hectáreas, algo que Chile logró en 10 años, hace dos décadas, como recuerda Carlos Mario Jiménez, ingeniero de Cartón de Colombia, empresa que tiene sembradas 69.680 hectáreas.

Madera que se hace energía

Este y otros desafíos fueron discutidos por empresarios, consultores, autoridades ambientales, Ong´s y académicos que se congregaron por tres días y hasta ayer, en Mundo Madera 2011, en el Palacio de Exposiciones.

Se trató de la primera feria de este tipo que integró en un solo lugar a 56 expositores del sector, un seminario internacional para explorar nuevos usos alternativos de la madera en la construcción de vivienda, la nanotecnología y también en la generación de electricidad y biocombustibles.

En este tema, el profesor Luis Horta Nogueira, de la Universidad Itajubá (Brasil) explicó que «llegó la hora para que Colombia siembre su energía». Este experto explicó que el 4,3 por ciento de la energía de su país (360 megavatios) proviene de biomasa de sobrantes de madera y el Gobierno brasileño estableció unas cuotas de compra de energía de fuentes renovables.

De otra parte, ayer en la tarde se realizó la primera rueda internacional de negocios responsables madera, coordinada por la Ong WWF (World Wildlife Found). Por primera vez en el país se sentaron a cruzar ofertas y demandas 45 empresas en 156 citas, 10 de ellas chilenas y tres más panameñas.

«Esta feria fue una respuesta a un sector con muchas potencialidades de crecimiento, donde tenemos unas ventajas comparativas importantes y ya es atractivo para inversionistas extranjeros», explica Juan Carlos Osorio Vélez, coordinador General del certamen.

A las ventajas que se refiere es a condiciones de clima, suelo y ubicación en el trópico, que se suman a las tierras disponibles en el país para rehabilitar con proyectos forestales, cerca 30.000 hectáreas recuperables, así como otras inactivas que están por fuera de áreas protegidas de bosques naturales. En Antioquia, por ejemplo, s0lo hay sembradas 60.000 hectáreas de uso comercial, y hay un potencial de un millón de hectáreas, señala Fredy Zapata Díaz, director de Proyectos de la consultora Silvotecnia.

«Hay futuro si remamos para el mismo lado»

«Colombia es un país cortoplacista con necesidad de una cultural forestal que lo lleve a desarrollar una política de largo plazo que requiere unos incentivos adicionales a la voluntad del Gobierno actual», afirma Víctor Giraldo Toro, experto en reforestación y exdirectivo de Cartón de Colombia.

Para él, es clave que ya se siembren los eucaliptos que se puedan cosechar en 2018 y los pinos que se explotarán en 2025, y no quedar a merced de importaciones crecientes de países como Chile y China. «Falta un acuerdo de voluntades entre madereros, industriales y gobierno para remar hacia el mismo lado», concluyó.

Implicaciones

1. Combatir madera ilegal. Según la WWF cerca del 42% de la madera que se comercializa en el país fue extraída ilegalmente.

2. Seguridad jurídica de largo plazo. En el país hay proyectos forestales de capital chileno, brasileño, canadienses, mexicano y sueco.

3. Mayor control del Estado. Actores de la cadena ven con preocupación la explotación irregular en zona del Chocó y Llanos Orientales.

4. Conciencia ambiental. Falta más educación de los consumidores de productos de madera para que exijan a sus fabricantes las certificaciones de origen.

Fuente: www.lignum.cl