Brasil: Industria de celulosa preocupada por aumento de costos

Esto obedece a alzas sostenidas en el precio de la tierra y de la mano de obra. Otro factor que influye en una pérdida de competitividad es el fortalecimiento de la moneda brasileña en relación con el dólar estadounidense

A pesar de que los retornos por exportaciones de la industria de la celulosa y papel crecieron un 6,8% entre enero y julio de este año en comparación con el mismo período del año anterior, por un monto cercano a los US$ 4.100 millones, y que la producción de celulosa totalizó 8,1 millones de toneladas en el mismo lapso (2,4 millones de toneladas más que los primeros siete meses del año pasado), en el sector no están totalmente tranquilos.

Según informaron diversos actores durante la primera sesión del el VI Congreso Latinoamericano sobre las Perspectivas de Celulosa y Papel, encuentro organizado por la consultora RISI y que se realizará entre el 30 y el 31 de agosto en São Paulo, Brasil, la industria de la celulosa está experimentando una pérdida de competitividad. Esto obedece, fundamentalmente, a alzas sostenidas en el precio de la tierra y de la mano de obra (el salario mínimo se ha triplicado en el país en la último década, se informó en el congreso). Además, ha sido determinante el fortalecimiento de la moneda brasileña, el real, en relación con el dólar estadounidense, lo que en la práctica está afectando a un sector exportador como el de la celulosa.

Según informó Elizabeth de Carvalhaes, presidenta ejecutiva de Bracelpa, la asociación que representa a los fabricantes de celulosa y papel en Brasil, “los costos de producción han aumentado y el real se valoriza cada vez más, y no se vislumbra una recuperación del dólar estadounidense”. Por lo anterior, no dudó en afirmar que la industria se ve enfrentada a una pérdida de competitividad.

Lo mismo opinó Marcos Assumpção, CFO de Commodities Business de Itaú, quien dijo que el costo de la tierra en Brasil se triplicó en términos de dólares y que el costo de la madera, que es el gran referente de la competitividad de las empresas brasileñas, “ha aumentado bastante”. El experto dijo que frente a esta situación el sector necesita expandir su capacidad, aumentar la productividad y consolidarse aún más. Esto último, no obstante, no se vislumbra en el corto plazo, aunque sí podría ocurrir que las compañías comiencen a aprovechar sus sinergias.

Otro factor que está emergiendo con fuerza es la competencia del sector de la bioenergía, el cual, en términos prácticos, está compitiendo por la tierra, lo que presiona los precios. “Hay que tener presente que hoy Brasil tiene más tierra plantada dedicada exclusivamente a la bioenergía que todo el resto del mundo junto”, dijo Bob Flynn, director de International Timber de RISI.

En este mismo sentido, el especialista en biomasa Laércio Couto, miembro del directorio de World Bioenergy Association, estimó que la demanda por biomasa va a aumentar en Brasil, ya que en términos de precio es muy competitiva en relación con el gas natural, por ejemplo.

Por todo lo anteriormente expuesto, los ejecutivos de las principales empresas del sector de la celulosa están evaluando cómo mejorar la competitividad. Y la biotecnología, la eficiencia y la mayor escala aparecen como las más probables soluciones en el horizonte. Otra opción que están analizando algunas empresas, según comentó el CEO de FIbria, Marcelo Strufaldi Castelli, es ser más eficientes en la gestión forestal y no necesariamente ser propietarios de toda la materia prima que se necesita para producir, sino que llegar a esquemas donde los contratos a largo plazo con proveedores de madera van a ser cada vez más significativos.

Fuente: www.lignum.cl