El proyecto lo inició hace tres años en el extranjero como una forma de conseguir
una modalidad de trabajo en los bosques que una las necesidades humanas con la
conservación. En Chile comenzó recién en 2010. Otras ONG ambientalistas miran la iniciativa con recelo.
La batalla es épica. Por décadas las organizaciones no gubernamentales y las
empresas forestales han sido archirrivales, viviendo en continuas lides y batallas, en Chile y en el mundo. Y la causa de esta casi eterna guerra son los bosques, los
endémicos o nativos.
Mientras los medioambientalistas buscan preservarlos y evitar la tala
indiscriminada, en la otra vereda los ejecutivos quieren optimizar recursos y
reforestar. Dos posiciones aparentemente irreconciliables. Aparentemente, porque
ahora una de las organizaciones emblemáticas en la protección del entorno -la
World Wide Fund (WWF)- está desarrollando un programa de Nueva Generación
de Plantaciones (NGP). El concepto es simple: generar una modalidad de trabajo en
el bosque, que compatibilice las necesidades humanas con la conservación de la
biodiversidad. El objetivo es que mediante ejemplos concretos de bosques que
están bien administrados, los empresarios de las forestales, e incluso el Gobierno,
emulen sus operaciones para ser más sustentables.
La organización ya trabaja en Brasil, Suecia, China, Sudáfrica, Malasia y Reino Unido durante estos últimos tres años y aterrizó en Chile para el Bicentenario.
Mercado Sustentable
Desde la óptica empresarial, el NGP es dar un paso más, en un camino que en los
últimos años la industria ya inició, hacia un mercado cada vez más sustentable que pueda explotar los recursos forestales, incorporando cada vez más las exigencias ambientales y sociales que hoy existen sobre el tema forestal.
«Hay una creciente demanda por sellos de certificación como FSC (Forest
Stewardship Council), y este proyecto aporta con la identificación, documentación y difusión de las mejores prácticas a nivel internacional», explica Rodrigo Catalán,
coordinador del programa forestal de la World Wide Fund en Chile.
En Chile, CMPC es una de las empresas que está participando en el programa.
«Nos interesó participar para conocer, conversar, discutir y eventualmente convenir, criterios de cultivo y manejo silvícola más eficientes», comenta Daniel Contesse, gerente de tecnología silvícola de Forestal Mininco.
Para Contesse, el objetivo de su participación en NGP es «a través de esta nueva
generación de plantaciones ir incorporando el mejor estado del arte en este
negocio, conciliando razonablemente lo económico, lo social y lo ambiental», dice.
Actualmente existen diferentes certificaciones que buscan dar cuenta de un manejo forestal sustentable y el programa lo que busca es acreditar y replicar este modelo en los bosques chilenos.
La reacción de los verdes
Lo que para la WWF es una forma de conseguir que las plantaciones cumplan con
las demandas ambientales y así apoyar la protección de las especies, podría ser
visto como un cambio de bando por otras ONG ambientalistas.
«Es un hecho conocido que las plantaciones forestales con fines industriales han
sido impugnadas por algunas ONG y sectores de nuestra sociedad en el mundo,
atribuyéndoles muchas veces defectos, inconvenientes y perjuicios que no tienen
fundamentos científicos ni prácticos», explica Contesse.
La iniciativa de la WWF sería la primera que busca llegar a un consenso con la
industria. El cambio revoluciona conceptos que hasta hace algún tiempo las ONG
tenían contra los planes de reforestación, pero concientizando el uso y mantención
de los bosques.
Sin embargo, el programa recién comienza a implementarse en el país. Hasta el
momento CMPC y Masisa son las únicas compañías que estarían trabajando junto a la WWF. Por ello no muchas ONG locales están al tanto de lo que se está
generando.
En la WWF comentan que recién están dando a conocer el proyecto, pero
«esperamos que sea bien recibido, ya que aborda las principales preocupaciones
que tienen estas organizaciones en relación con los impactos de las plantaciones
forestales», dice Catalán.
Para muchas ONG la idea de establecer plantaciones es una especie de «lavado de
imagen», aunque otros se abren a la posibilidad de crear plantaciones sustentables.
Bernardo Zentilli, presidente del Comité Pro Defensa de la Flora y Fauna (Codeff),
explica que «estas iniciativas pueden ser muy loables, pero tienen que ser muy
cuidadosas con los problemas sociales. Hay que velar que las empresas no
desplacen al campesinado», explica.
Zentilli dice que si bien el proyecto parece ser una buena iniciativa a la hora de
implantarlo, tanto Codeff como otras entidades van a estar muy atentas para que
«estas cosas se hagan bien», comenta.
¿Quiénes trabajan con el programa Nueva Generación de Plantaciones?
Actualmente, el proyecto que se inició en 2007 tiene al menos una empresa en
cada uno de los siete países con los que trabaja.
Brasil: Fibria, empresa de celulosa.
Suecia: Stora Enso, compañía que produce celulosa y papel.
China: trabaja junto al Gobierno chino.
Sudáfrica: Mondi, compañía papelera.
Malasia: trabaja junto al gobierno y organizaciones no gubernamentales.
Reino Unido: trabajan organizaciones no gubernamentales en cooperación con las
entidades gubernamentales.
Chile: CMPC y Masisa.
Manejo forestal sustentable
Varios sellos o certificaciones reconocidos internacionalmente garantizan que la
madera es parte de un manejo forestal sustentable.
Forest Stewarship Council (FSC): organización no gubernamental fundada en
Canadá en 1993, por grupos de 25 países. Promueve el manejo forestal
responsable con el medio ambiente y económicamente viable, mediante la
regulación de 10 principios y 56 criterios que el FSC ha fijado, además de las
normas que crean pertinentes en cada país. Actualmente hay más de 600 personas e instituciones que pertenecen al FSC en todo el mundo.
Programa para el Reconocimiento de Certificación Forestal (PEFC): es una
organización internacional que busca la ordenación forestal sustentable con
certificaciones de terceros. Promueve las buenas prácticas en el bosque y respalda
los sistemas nacionales de certificación forestales que desarrolla en diferentes
países. Tiene cerca de 30 sistemas nacionales de certificación aprobados y más de
220 millones de há de bosques certificados.
CERTFOR Chile: es una organización de derecho privado acreditada por la PEFC
para certificar las empresas que desarrollen mecanismos sustentables en la
industria forestal. Nació en 2002, como un proyecto desarrollado por el Gobierno,
Fundación Chile y el Instituto Forestal (Infor).
World Wide Fund
La World Wide Fund, también conocida como World Wildlife Fund, tiene más de 45
años, trabaja en más de 100 países y es apoyada por cerca de cinco millones de
miembros en todo el mundo. Su objetivo es asegurar la biodiversidad de los
distintos países. En Chile está abocada principalmente al sur y su naturaleza.
Fuente: Lignum