Dos visiones sobre la ley de tierras

Esta semana los agricultores de maíz, arroz, caña, soya, ganaderos y camaroneros
rechazaron un anteproyecto de ley de tierras que establece límites a la tenencia de
la tierra. Fue presentado por el Sistema de Investigación de la Problemática Agraria (Sipae) a pedido de la Asamblea y de la Conferencia Nacional de Soberanía
Alimentaria.

Esta propuesta aún no se debate entre los asambleístas, pero los productores se
oponen a que se establezca un límite a la tenencia de la tierra y que se expropien
las tierras que están en producción. Estas ideas están expuestas en el anteproyecto.

Por parte del Ministerio de Agricultura se elabora un proyecto de ley de tierras, que será enviado al presidente Rafael Correa para que lo apruebe y los presente a la
Asamblea Nacional. Este documento estará listo a fines de este año.

De este tema hablan el ministro de Agricultura, Ramón Espinel, y el presidente de
la Asociación de Ganaderos del Litoral, Paul Olsen.

‘No se expropiará la tierra productiva’

HOJA DE VIDA

Su experiencia. Es el tercer Ministro de Agricultura en este Gobierno y está al frente de esa Cartera de Estado desde el 14 de julio del año pasado.

Su punto de vista. No se pondrá límites a la tenencia de la tierra ni se expropiarán
las tierras que están en producción, porque es un absurdo.

Vamos a entregar 2,5 millones de hectáreas de tierras a 375 000 familias en un
proceso de cuatro años.

¿Se va a limitar la tenencia de la tierra a 500 hectáreas, según el anteproyecto que se presentó a la Asamblea?

No hay un proyecto que establezca eso. Es una propuesta del Sistema de
Investigación de la Problemática Agraria (Sipae) que presentó a petición de la
Comisión de Soberanía Alimentaria de la Asamblea, pero no se ha estudiado como
tal. El Sipae usa esa cifra para decir que tenemos que limitar, pero esa no es la
posición del Ministerio de Agricultura ni del Gobierno.

¿Cuál es la posición del Ministerio sobre poner límites a la tenencia de la tierra?

No tenemos establecido un límite a la tenencia de la tierra que está cultivada. No
hay razón para limitar las que se cultivan.

¿Eso significa que no se va a quitar tierras?

Absolutamente no. La tierra productiva, cual fuere su tamaño de explotación, se
respetará, porque en Ecuador rige un sistema de propiedad privada. No será
afectada si produce.

Hay casos como los ingenios que tienen grandes extensiones de tierras, ¿a ellos y a
los demás productores no se les expropiará?

Sería absurdo que a un ingenio con 10 000 ó 15 000 hectáreas le quitemos tierra,
porque tiene demasiado. Si tiene 15 000 hectáreas produciendo, es fantástico, que
siga produciendo.

Entonces, ¿en qué consiste el proyecto de tierras que ustedes desarrollan?

El Ministerio trabaja en un proyecto que propone un debate, pero no en torno a
que se reforme o no la tenencia. Debemos definir cuál es el modelo de agricultura
que Ecuador quiere desarrollar.

¿Es una reforma agraria?

Sí, el proyecto de Ley de Tierras no solamente será para repartir tierras sino para
ver cómo se usa, cómo se asegura que el uso sea efectivo y ayudar a producir.

¿Se va a quitar tierras para dar a los campesinos?

Tenemos 14 millones de hectáreas capaces de producir. De estas, 4 millones son
cultivadas y 10 millones no, pero de estas, 3 millones están al lado de fuentes de
agua, reservorios, ríos, vías de primer orden y cerca de mercados y no producen.

Estamos proponiendo afectar 2,5 millones de hectáreas para transferir a pequeños
productores.

¿Hay concentración?

Los censos dicen que la estructura de la tenencia de la tierra no se ha modificado,
pese a las reformas de 1964, 1973 y la Ley del INDA de 1994. Nos muestran que el
2% de los propietarios tiene el 50% de la tierra y el 64% tienen menos del 6%. El
2% representa 7 millones de hectáreas y el 64% posee 840 000 hectáreas. Esto
significa que tenemos un 0,81 de concentración de la tierra en el índice de Gine.

Esta medida técnica nos dice que mientras más cerca estamos de 1 más
inequitativa es la distribución. Cuando se acerca a 0 es más equilibrada.

Pero algunos dirigentes indígenas y campesinos quieren que se ponga un límite a la tenencia y así acabar con el latifundio.

Tenemos que consensuar con los grupos campesinos, porque una cosa es hablar
de lo que es posible y otra hablar de una utopía. Es algo que no es relevante y
decir que vamos a quitar los espacios productivos no nos lleva a mejorar las
conducciones de vida de la gente.

‘Aquí no existen los monopolios agrarios’

HOJA DE VIDA

Su experiencia. Es ganadero y presidente de la Asociación de Ganaderos del Litoral
y Galápagos. También fue negociador privado del TLC.

Su punto de vista. El sector agropecuario es el más sacrificado y brinda un alimento sano, de calidad y barato que requiere apoyo constante.

‘Los intermediarios son los que se quedan con las ganancias de la producción y
explotan al campesino’.

El Ministerio de Agricultura y Ganadería (Magap) prepara una reforma agraria que busca redistribuir la tierra, ¿por qué se oponen?

Hay un anteproyecto que fue elaborado por el Sipae donde se pretende expropiar
las tierras mayores a 500 hectáreas y eso lo rechazamos porque atenta contra la
propiedad privada. El Magap también elabora una propuesta y su ministro, Ramón Espinel, dijo que las tierras bien cultivadas no serán expropiadas.
Esperamos que eso se cumpla.

¿Ustedes han participado en ese proyecto de reforma?

No. Hasta ahora no sabemos de qué se trata. Por eso pedimos una reunión el
próximo martes con el ministro Espinel para explicar la preocupación del sector y
saber más de las reformas que preparan.

Los informes del Magap señalan que el 85% de los productores tiene menos de 25
hectáreas y que no será afectado con estas reformas, ¿en qué les afecta?

En Ecuador no hay grandes extensiones mayores a 20 000 hectáreas como en otros
países. Los que tienen grandes áreas son los ingenios porque así lo requieren para
su producción mientras que los bananeros no pasan de las 10 000 hectáreas. La
tierra está bien distribuida.

Pero hay un 15% que es propietario de más de 8 millones de hectáreas.

Las Unidades de Producción Agrícolas (Upas) que tienen menos de 50 hectáreas
representan el 39% y las que tienen entre 50 y 100 hectáreas suman el 32%. Solo el 29% tiene más de 200 hectáreas. Así es la distribución.

La propuesta es limitar en el futuro la tenencia de tierras hasta 500 hectáreas para evitar la concentración…

En la parte agropecuaria no existe monopolio, por lo que no se debe poner límites
al uso de la tierra. Hay que dar apoyo, estímulos y programas de financiamiento
para los campesinos.

Pero hay concentración de tierras en pocas manos …

No hay monopolios. Por ejemplo, no hay monopolio de ganaderos porque no fijan
el precio de la leche ni de la carne. Quien fija esos valores es el consumidor y a
veces interviene el Estado. Hay sectores que tienen grandes extensiones pero no
son cultivables y por eso no se puede expropiar ni limitar.

¿Hay tierras que están ociosas y el Estado quiere redistribuirlas?

De acuerdo con eso porque la Constitución señala que toda tierra debe cumplir
una función social y ambiental. No necesitamos más leyes extras para hacer
cumplir la Ley. Pero primero hay que definir qué entendemos por función social y
ambiental.

¿La reforma agraria busca reducir la pobreza y mejorar los niveles de vida ?

Se debe trabajar mejor en los canales de comercialización, industrialización,
tecnología y mercadeo para que los productos agrícolas sean pagados con precios
razonables y justos. No es cuestión de expropiar y limitar las tierras.

¿Cómo se financia el sector agropecuario?

Los créditos no llegan al campo. Las formas de financiar es vendiendo la tierra. Y lo
peor es que cada vez que hay este tipo de rumores de expropiación hay un sector
muy sensible que deja de invertir y producir. A la final el consumidor es el más
afectado.

Fuente: El comercio